Boomera trabaja con los traperos de Brasil y con grandes marcas para encontrar nuevos usos creativos al plástico que normalmente termina en los vertederos, cambiando vidas e incluso convirtiendo la basura en música.

“Creemos que nada es basura. Todo, incluso las cosas más inimaginables, se puede transformar.” Guilherme Brammer

Todos estamos familiarizados con el bumerán, una herramienta de madera diseñada para volver al punto de partida, pero ¿has oído hablar de una ‘woomera’? Se trata de una lanza aborigen australiana que aterriza con precisión. La empresa brasileña Boomera ha combinado las dos palabras porque quiere mostrarnos que dar vueltas en círculos puede tener un impacto positivo, si se hace con inteligencia.

Convencidos de que todo lo que va, vuelve, estos revolucionarios especialistas en economía circular con sede en São Paulo convierten la basura en negocio para salvar el planeta.

Economía circular

Un sistema regenerativo alternativo que reutiliza y recicla los recursos para mantenerlos en uso el mayor tiempo posible para evitar la producción primaria.

En América Latina, cuatro millones de personas dependen de los desechos como fuente de ingresos. Boomera trabaja con los ‘catadores’ (traperos y recolectores de residuos) de Brasil para encontrar nuevos usos a los productos plásticos de difícil reciclaje que normalmente terminan en los vertederos, trabajando con tecnología punta para transformar los residuos en materia prima y luego en diseños geniales.

La contaminación marina es un problema creciente en el mundo actual. Daña la fauna, afecta a los ecosistemas y puede causar enfermedades. Solo en Brasil, 6,3 millones de toneladas de basura no recolectada terminan cada año en los vertederos. Del total de residuos plásticos que se producen anualmente en el país sudamericano, solo un pequeño 1,28% se recicla de manera efectiva. Eso lo convierte en el cuarto mayor productor de plástico del mundo. Esta mala gestión de los desechos a nivel mundial ha hecho que estemos encontrado partículas microplásticas en el agua potable.

Frustrado por la falta de reciclaje que observó en su ciudad natal de São Paulo, en 2011, el ingeniero de materiales brasileño Guilherme Brammer (en la foto inferior), creó Boomera (entonces llamada Wisewaste) para encontrar soluciones innovadoras que dieran nueva vida a las materias primas. Quería reutilizar productos de desecho difíciles de reciclar, como colillas de cigarrillos y cápsulas de café. Sabía que conseguir que las grandes empresas pusieran en práctica una economía más circular sería la forma más eficaz de ayudar al mundo a cumplir los objetivos de sostenibilidad para 2021.

Hoy Boomera ayuda a las grandes empresas a hacer que sus modelos de producción sean más sostenibles, mostrándoles cómo ser más ecológicos puede generar nuevas oportunidades de negocio. La empresa ha creado una metodología llamada ‘Circular Pack’ para convertir los residuos en una línea de productos que conjugan tecnología, diseño, ciencia e inclusión social. Incluso han encontrado soluciones para Adidas, Procter & Gamble y Nestlé.

Para Dolce Gusto de Nescafé, Boomera encontró una manera de reciclar miles de cápsulas para crear accesorios con resina plástica. En otro proyecto, las escuelas recolectaron millones de envases de bebidas TANG, que fueron reciclados y convertidos en instrumentos musicales que fueron donados a escuelas de todo el país, llegando a miles de niños.

Con Adidas, convirtieron los residuos extraídos de las aguas de Río de Janeiro, recolectados por los traperos (en la foto superior), en cientos de conos para actividades deportivas (en la foto de abajo).

Si para un producto o embalaje no se encuentra una solución técnica reciclable, se lleva al laboratorio de ingeniería circular de Boomera, en el Instituto Mauá de Tecnología de São Paulo, donde se realizan pruebas y se analizan diferentes vías de reciclaje.

Una vez resuelto el reciclaje técnico del material, Boomera trabaja con una red de más de 200 cooperativas de traperos de todo Brasil para recolectar el material de desecho, aportando trabajo a esas comunidades, que luego lo venden a empresas de reciclaje, demostrando que el plástico es demasiado valioso para dejarlo perder.

A través de su proyecto “Reciclaje para un cambio”, en alianza con la Iniciativa Dow (una empresa que trabaja para cambiar el futuro de la gestión de residuos en América Latina), Boomera quiere transformar la vida y el trabajo de miles de personas en historias de impacto social. El proyecto reúne a expertos y líderes para crear soluciones que apoyen a la comunidad, como por ejemplo mejorar sus condiciones de trabajo.

En 2019, Guilherme Brammer fue seleccionado como Emprendedor Social por Folha de S. Paulo y, en 2016, por la revista Pequenas Empresas & Grandes Negócios.

AcciónAtlas: Descubre más soluciones para los residuos plásticos.