¿Es posible revivir los arrecifes de coral? Biorock Indonesia así lo cree, y lo hace con la ayuda de la tecnología y de la gente local.

Indonesia alberga el 18% de los arrecifes de coral del mundo, pero más del 30% de ellos se encuentran en malas condiciones. Su preservación y restauración es de vital importancia para la salud de nuestros mares, pero se enfrentan a problemas como las prácticas de pesca destructivas, los daños provocados por grandes buques, los derrames de petróleo y el cambio climático.

La experta en restauración de arrecifes de coral, Prawita Tasya Karissa, sabía que algo tenía que cambiar para que el coral de Indonesia sobreviviera en estas condiciones, así que cuando descubrió la tecnología Biorock en 2003 se decidió a actuar.

El Biorock es un material similar al cemento que utiliza pequeñas corrientes eléctricas bajo el agua para estimular el crecimiento de la piedra caliza en lo que se podrían denominar “arrecifes electrificados”. Así, el coral crece más rápido y más saludable, y se hace más resistente a las condiciones inestables. Después de conocer el proceso inventado por el professor Wolf Hilbertz y el Dr. Tom Goreau, Tasya no perdió el tiempo en aplicarlo a los arrecifes de Indonesia. Una serie de proyectos piloto en todo el país, desarrollados con estudiantes atraídos por esta tecnología, fue el comienzo de Biorock Indonesia (creada en 2015).

Tasya explica que al principio les impulsaba la pasión por salvar los arrecifes. “Cuando comenzamos, éramos solo estudiantes que tenían la idea de restaurar arrecifes a través de la tecnología, pero de nuestra experiencia aprendimos que la tecnología no siempre es la respuesta a los problemas.” Descubrieron que, junto con la tecnología, necesitaban averiguar “cómo hacer que los esfuerzos de restauración del arrecife repercutan en la comunidad local”.

La creación de comunidades sólidas es algo que Tasya se toma en serio, no solo en su papel de directora de Biorock Indonesia, sino también en su trabajo en la gestión de organizaciones sin ánimo de lucro y como defensora del empoderamiento y la igualdad de las mujeres. Su trabajo en la protección y conservación de la infancia, junto con su papel como consultora del Clean Development Mechanism y su propia investigación innovadora en las aplicaciones de la tecnología Biorock, le ha dado una visión más amplia de la restauración de los arrecifes de coral. Como ella dice, no se pueden solucionar los problemas ambientales sin considerar también los desafíos a los que se enfrentan las comunidades.

Como resultado, Biorock Indonesia no solo se dedica a instalar los arrecifes, sino que también trabaja en maneras de apoyar económicamente a las comunidades y asegurarse de que participan en el proyecto de restauración. El equipo de “jardineros”, que primero cultiva el coral en viveros durante dos meses antes de ser transferidos, también da formación a la comunidad sobre la conservación de los arrecifes. Una vez que se instala el jardín Biorock, se necesitan entre tres y cinco años para que se convierta en un ecosistema saludable, y la recuperación completa lleva décadas, por lo que éste es un proyecto a largo plazo que puede involucrar a la comunidad durante generaciones.

Otras formas de involucrar a la comunidad es a través del Biorock Experience, un proyecto de turismo educativo que permite a los visitantes hacer recorridos guiados de ‘snorkel’ para conocer la tecnología, y de los programas de tutoría, que capacitan a la próxima generación de “protectores del coral”. En 2020, seleccionaron a 12 jóvenes indonesios que supervisaron el estado de los arrecifes en tres puntos en Bali y Ambon, recopilando datos vitales para ayudar a mejorar la gestión y la política de gestión de los arrecifes.

Biorock Indonesia ha formado a más de 1.000 personas en 13 aldeas para que puedan continuar con la restauración de 200 kilómetros cuadrados de arrecifes de coral destruidos y cinco kilómetros de costa erosionada.

Encontrar formas de equilibrar la calidad de vida con el medio ambiente ha sido un desafío continuo, pero Tasya explica que cada vez más personas ven el enfoque holístico de Biorock Indonesia como un camino a seguir para el crecimiento sostenible. “Estamos en la fase en la que mucha gente empieza a ver nuestro trabajo y nuestros resultados, y nos preguntan qué se puede hacer para ampliarlo a mayor escala”. Ahora, trabajando en estrecha colaboración con gobiernos locales y nacionales, Biorock Indonesia es una prueba de que los estudiantes apasionados pueden generar grandes cambios.

AcciónAtlas: Apoya a Biorock Indonesia adoptando un pequeño coral o un jardín entero. Si te encuentras en Indonesia, puedes visitar uno de sus arrecifes o contactar con ellos para pedir información sobre el recorrido educativo Biorock Experience.

Escritora, editora e investigadora afincada en Barcelona, con preferencia por las artes, la diversidad cultural y la expresión creativa para el cambio social.