Cuando Guzel Sanzhapova, fundadora y propietaria de las corbatas de lazo Cocco Bello, decidió comenzar a producir miel cremosa con bayas en el pueblo ruso de Malyy Turysh, en los montes Urales, pudo obtener ganancias mientras lanzaba un salvavidas a una pequeña comunidad cansada en busca de una nueva forma de vida. Utilizando la miel recolectada del apiario de su padre (en el mismo pueblo, en la región rusa de Sverdlovsk Oblast) y también las bayas recolectadas por mujeres locales, la compañía de Guzel Sanzhapova produce un producto bastante único: la miel con bayas. Sin embargo, en lugar de convertirse en una empresa con beneficios, su proyecto ha proporcionado trabajo a las mujeres mayores que viven en la aldea y esencialmente ha ayudado a revitalizar a toda la comunidad. Cocco Bello ha ganado el Premio al Impacto Social (Rusia) por el proyecto de reactivación de la pequeña aldea y la gran defensa del emprendimiento social.

El proyecto contribuye al desarrollo de la comunidad de Malyy Turysh y proporciona empleo a más de 50 aldeanos, han construido un parque infantil para niños y está construyendo un centro comunitario y un pozo de agua potable, así como un centro turístico. La fundadora de Cocco Bello, Guzel Sanzhapova, promociona su tienda a través de amigos y de las redes sociales. Con la ayuda de su padre apicultor ha proporcionado empleo a casi todo el pueblo, porque cada tarro de mermelada revierte en la comunidad.

Periodista y blogger, ha sido redactor de varias revistas de viajes, naturaleza y ciencia durante los últimos 20 años.