“Los casquetes polares se están derritiendo, Leonard. ¡En el futuro, la natación no será opcional!”

Eso dice el genio inepto Sheldon Cooper en The Big Bang Theory mientras explica por qué aprendió a nadar por Internet (antes que en una piscina). Tal vez es llevar el fatalismo climático un poco lejos, pero la actitud de Sheldon es más frecuente de lo que piensas.

Debemos y podemos resolver el cambio climático. Es así de simple. Y así de difícil. Porque el cambio climático es algo enorme y sus consecuencias son muy graves. Pero la solución comienza con la creencia de que podemos hacerlo. Lo que hace que el optimismo sea esencial. La esperanza vence al miedo. Es la actitud que inspira el progreso.

La campaña #ClimateOptimist nació de la profunda convicción de que el fatalismo climático es fatal. Futerra y The Climate Group, dos de las principales organizaciones de defensa de la acción climática del mundo, unieron fuerzas para interrumpir la narrativa climática fatal y dominante.

La investigación encargada para esta campaña demostró por qué eso es más importante que nunca. La primera encuesta de este tipo, realizada en  26 países por Ipsos, reveló una crisis en cómo nos sentimos respecto al cambio climático. Si bien solo el 4% de las personas de todo el mundo niega que el cambio climático esté ocurriendo, un asombroso 14% cree que ahora ya es inevitable. ¿Y el grupo demográfico con menos esperanzas de poder solucionar el cambio climático? El joven. El 22% de las personas menores de 35 años cree que ya es demasiado tarde para detener el cambio climático.

Con ese nivel de derrotismo, corremos el peligro de una derrota inevitable.

¿Cómo está alterando esta tendencia la campaña #ClimateOptimist? La encuesta también reveló que el 61% de las personas de todo el mundo reciben muchos más impactos negativos sobre el cambio climático que información sobre los avances en su reducción.

Climate Optimism ha arrojado luz sobre el cambio climático con informaciones que han generado más de 30 millones de impresiones en Twitter, y su película de campaña cargada de ejemplos tiene miles de visitas.

La campaña se lanzó en la Climate Week de Nueva York en septiembre de 2017, después de un desarrollo vertiginoso de tan solo ocho semanas y un presupuesto reducido. Los mensajes fueron compartidos por Ellie Goulding, The Leonardo DiCaprio Foundation, marcas como H&M e influencers de Instagram. Los patrocinadores incluyen Mars, DivestInvest, Ashden, VF Corp e Interface.