Swedish Stockings es la primera y única empresa de medias sostenible que está cerrando el círculo convirtiendo sus medias recicladas de nylon a mesas.

El documental “The light bulb conspiracy” pone las bombillas o los iPods como ejemplos de productos diseñados para usar y tirar, con una vida útil determinada para promover el consumismo, pero el ejemplo de las medias de mujer fue el que llamó más la atención de Linn Frisinger, que decició fundar Sweedish Stockings, una línea de medias de alta calidad fabricadas con nylon reciclado.

Lo que no esperaba Linn es que los compradores mostraran interés en poder devolver las medias rotas para reconvertirlas en medias nuevas. Con ganas de aportar una solución a estos residuos, aceptó las medias viejas aunque fuera inviable separar las fibras de nylon del elastano para convertirlas en el mismo producto.

“En el reciclaje, solemos creer que una botella de plástico se convertirá en una nueva botella de plástico, pero no suele ser el camino más efectivo para cerrar el círculo. Hay que buscar otras opciones.”

La opción que encontró Linn fue convertirlas en mesas. Sí, estáis leyendo bien, ¡mesas! Todo fue rodado: su padre trabaja en una fábrica de tanques de fibra de cristal, así que disponían de grandes moldes cilíndricos y, después de varias pruebas, consiguieron la fórmula que mezcla entre un 25 y un 65% de medias y fibra de cristal reciclada de la fábrica. Una singularidad: cuanto más oscuras son las mesas, más medias hay en su composición.

Hoy en día, se trata de la primera y única empresa sostenible de medias, y tiene el objetivo de animar e influenciar a otras empresas a cerrar el círculo a través del reciclaje e impulsar la colaboración transfronteriza para seguir aprendiendo e ideando nuevas soluciones. “Colaborando con industrias especializadas y más pequeñas se pueden conseguir soluciones más innovadoras.”

AcciónAtlas: Puedes hacer llegar medias de cualquier marca a través de los containers en los puntos de venta de Sweedish Stockings.