El parque inundable de La Marjal actúa como vaso de retención de aguas pluviales, además de ofrecer refugio a las aves acuáticas.

La lluvia escasea en buena parte de España, pero también puede provocar inundaciones destructivas en determinados momentos del año. Más allá de la función de ocio y esparcimiento de todo parque, La Marjal cumple una función hidráulica: en caso de lluvias fuertes puede almacenar hasta 45.000 m3 de agua (lo que serían 18 piscinas olímpicas), reduciendo el riesgo de inundación en la zona de urbanizaciones de la playa de San Juan, en Alicante.

Inaugurado en 2015, La Marjal supuso en el momento de su inauguración toda una innovación en el ámbito de los parques urbanos, sin un referente previo similar, y hoy es un ejemplo a nivel europeo en este campo.

Se concibió como una solución frente a las inundaciones que se producían a menudo en esta zona. Dos colectores reciben el agua de las crecidas y la canalizan hasta los dos estanques del parque. Este agua se lleva posteriormente a la planta de depuración de aguas residuales de Monte Orgegia para su reutilización con fines de riego urbano, principalmente, gracias a los más de 70 km de redes de agua regenerada de la ciudad.

La idea sobre la que está diseñado se basa en el funcionamiento de algunos sistemas naturales reguladores de los ciclos hídricos como son los marjales, tan frecuentes en todo el litoral mediterráneo.

Muy probablemente, las marjales cubrían parte de los terrenos naturales de la playa de San Juan antes de su transformación agrícola y, sobre todo, urbana. Se trata de depresiones o llanuras separadas del mar por una cadena de dunas que, en épocas de lluvias, acumulan los caudales procedentes de sus cuencas naturales, creándose áreas sometidas a un largo periodo de inundación.

El parque cumple con su función reguladora del agua, ya que recrea las características paisajísticas de un “espacio natural”, tanto por su configuración (en este caso, con un estanque de grandes dimensiones con una forma muy orgánica) como por la selección de especies vegetales, tanto arbóreas como arbustivas, e incluso con la incorporación inicial de una mínima fauna que coloniza y recrea los hábitats propios de los humedales.

Más allá de su objetivo principal, La Marjal pronto empezó a sumar otros atractivos al de una eficaz infraestructura contra riadas, cumpliendo una destacada función social y ambiental. Este parque municipal tiene una superficie total de 36.700m2 para el esparcimiento ciudadano, y además es un auténtico “pulmón verde” para Alicante, ofreciendo un hábitat ideal tanto para las aves residentes como para las migradoras. Unas y otras encuentran en el parque los recursos necesarios para su crecimiento, ya que su localización geográfica tan cercana a la costa lo convierte en un perfecto lugar de reposo.

“El parque en sí es una obra de ingeniería urbana sostenible altamente innovadora, que conjuga la ingeniería convencional de la obra hidráulica con una solución basada en la naturaleza, generando un espacio de disfrute ciudadano y un impulso para la biodiversidad dentro de la ciudad”, nos explica Mónica Pérez, Directora de Infraestructuras Verdes y Turismo Sostenible en SUEZ España.

El parque ha demostrado una elevada eficacia hidráulica: hasta noviembre de 2020, el volumen de agua pluvial recogida fue de 52.200 m3, con la consiguiente reducción de los impactos que las lluvias torrenciales producían en esta zona de Alicante. Además, este parque ha recibido varios reconocimientos: fue seleccionado entre los 101 ejemplos empresariales de acciones #PorElClima de ECODES y en 2018 ayudó a que la ciudad de Alicante obtuviese el premio “Ciudad Sostenible” de Ecomed-Forum Ambiental, en la categoría Ciclo integral del agua, por su gestión sostenible. También ha contribuido en múltiples ocasiones a la visibilidad de la ciudad de Alicante, siendo presentado en el Pabellón de España de la COP25 en 2019.

Los ciudadanos y visitantes del parque pueden apoyar esta iniciativa de muchas maneras, a través de su implicación en el cuidado de este espacio o a través de la participación de actividades que desde el propio ayuntamiento y Aguas de Alicante fomentan en el propio parque para el conocimiento y cuidado de su biodiversidad, tanto natural como animal. Se ha creado un itinerario ambiental para descubrir los diferentes rincones del parque. Además, organiza periódicamente visitas guiadas gratuitas para dar a conocer las particularidades de esta zona verde con un guía experto.

AcciónAtlas: Puedes disfrutar de este parque en persona o descubrirlo viendo este vídeo.

Este proyecto ha sido seleccionado como parte de MedFutures, un nuevo canal de contenido que incluye las soluciones más innovadoras e inspiradoras a la crisis del agua y del clima en el Mediterráneo y las personas que hay detrás. Atlas of the Future se complace en asociarse con Aigües de Barcelona.