Imagina pasar de los 30 a los 80 años en diez minutos poniéndote un traje de simulación de la edad y realizar tus actividades habituales con él durante un día.

En algún momento de nuestra vida, todos llegamos a experimentar hasta qué punto el mundo puede ser incompatible e inaccesible para las personas mayores.

Por primera vez en la historia, los ancianos superan en número a los jóvenes en todo el mundo. Ese es un desafío nunca visto para la sociedad. La investigación de tecnologías que se adapten a las personas mayores está ahora a la vanguardia del diseño. Un mundo más empático puede ser transformador para el bienestar físico y emocional de una población que envejece.

MIT AgeLab es un programa de investigación que cree que experimentar un problema específico ayuda a una mejor comprensión y, en última instancia, a un mejor diseño. Su traje de cuerpo entero AGNES (un acrónimo de ‘Age Gain Now Empathy System’) no es una representación perfecta de lo que se siente a los 70 o a los 80 años, sino una herramienta para experimentar empatía y ayudar a los investigadores y diseñadores a ver el mundo de manera diferente. El simulador permite a los usuarios, desde estudiantes hasta ingenieros y personas que están diseñando productos, servicios y espacios, ya sean comerciales, domésticos o públicos, usar el traje y comprender qué se siente al envejecer.

AGNES lo hace todo más difícil: las bandas conectan el brazo y la cintura para dificultar el alcance por encima de la altura de los hombros; un collarín que hace que el giro de la cabeza sea un movimiento completo del torso; los anteojos amarillos dificultan la visión; los tapones para los oídos simulan dificultad con los sonidos y tonos; los zapatos personalizados causan desequilibrio y los guantes simulan una sensación táctil y una fuerza reducidas.

A menudo, las personas que diseñan o toman decisiones sobre el espacio realizan cambios que, incluso teniendo a los adultos mayores en mente, podrían ser mejores si hubieran vivido esta experiencia de empatía. Tomemos el ejemplo de una cadena de farmacias que busca actualizar el diseño de su tienda. Al trabajar con los investigadores de AgeLab, los ejecutivos de una cadena de farmacias usaron el traje AGNES y pudieron actualizar el diseño de la tienda; ensanchar pasillos y dejar un camino despejado a través de la tienda, y bajar o subir productos o estantes determinados.

“Debido a que el envejecimiento ocurre gradualmente, los adultos mayores a menudo han creado una solución alternativa para resolver sus problemas, con el fin de seguir siendo independientes y lograr hacer las tareas que siempre han hecho; eso significa que en la investigación, las personas no siempre informan de lo que es difícil o desafiante para ellos. Usar el traje junto con otras investigaciones, como entrevistas a grupos o visitas guiadas con adultos mayores, ayuda a entenderlos”, nos dice la especialista en investigación de MIT AgeLab, Samantha Brady. “Cuando hacemos que los diseñadores que usan el traje realicen visitas guiadas con adultos mayores locales, podemos comparar las experiencias y ver si hay pequeños cambios que se pueden hacer desde una perspectiva de diseño que mejoren la accesibilidad.”

Hay cuatro trajes AGNES actualmente en uso: “ella” fue desarrollada originalmente por un terapeuta ocupacional y otros investigadores del AgeLab. Hay mucha demanda para alquilar o comprar el traje, pero el equipo de AgeLab desea utilizar AGNES ante todo como una herramienta de investigación y realizar programas comunitarios y de divulgación pública. “Formamos a estudiantes de la Facultad de Medicina de Harvard que están interesados en trabajar con adultos mayores; ellos entienden la biología pero esta experiencia de empatía es realmente reveladora para ellos.”

AGNES también se está utilizando actualmente para evaluar diferentes sistemas de transporte público en los Estados Unidos. Y se ha utilizado para la primera evaluación de transporte en Londres. Ese trabajo se está realizando en conjunto con diseñadores y arquitectos que visten el traje AGNES para comprobar lo accesibles que son realmente estos lugares y sistemas de transporte.

Otro trabajo que se lleva a cabo en el AgeLab explora cómo las personas de distintas generaciones comprenden y usan las diferentes tecnologías, y cómo se pueden usar para ofrecer cuidados o soluciones de movilidad.

“Tenemos un consorcio de investigación que considera el hogar como una plataforma para diferentes productos y servicios (IoT, sensores, servicio de economía compartida, etc.), para que los adultos mayores puedan envejecer en su casa de forma independiente”, explica Chaiwoo Lee, científico investigador del MIT AgeLab. “Hay tantas cosas que puedes añadir a tu hogar, pero la integración y la accesibilidad son un desafío. Estamos buscando un diseño universal y aplicaciones para diferentes grupos de edad, no solo para adultos mayores y cuidadores.”

Los diseñadores de hoy están trabajando en una gran cantidad de innovaciones para las personas mayores; desde gafas con reconocimiento facial hasta casas inteligentes para un envejecimiento saludable en el hogar y cuidadores robot. El traje AGNES se esfuerza por comprender las necesidades de una población que envejece y, con ello, permite que el diseño del futuro sea intuitivo, útil y accesible.

Mira ► Los ‘Try Guys’ usan el traje durante 24 horas, en primicia mundial:

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Este proyecto ha sido seleccionado como parte de AgeFutures, un nuevo proyecto de narración de historias que muestra las innovaciones que transforman la vida de las personas mayores y los diseñadores, emprendedores y líderes comunitarios que las lideran. Atlas of the Future se complace en asociarse con Independent Age.